Junto con la munición, son los verdaderos "Talones de Aquiles" de las armas automáticas y semiautomáticas
Autor: Tomás Cappi
Complementos infaltables e insustituibles, que pueden, ante una determinada falla o algún deterioro, convertir al Arma más eficiente en un elemento totalmente inútil e incapaz de cumplir con la función para la que fue creada.
Los Cargadores representan una parte esencial del Arma. Por medio de estos complementos, el Tirador puede alimentar a su Arma de forma rápida. Son algo más que simples contenedores de munición. Son elementos activos que empujan los cartuchos para que entren en el Arma y la alimenten. Además pueden formar parte integrante del Sistema de Seguro (Seguro de Cargador: el Arma no dispara si no tiene colocado el Cargador), y por otra parte, al vaciarse permiten bloquear el cierre de la corredera, avisando al Tirador que se ha agotado la munición. A excepción de peines descartables y cintas, se recargan y reutilizan.
Por su ubicación respecto al Arma, pueden diferenciarse dos tipos básicos de Cargadores: los que forman parte de la propia estructura del Arma, también conocidos como fijos, y los extraíbles. Partiendo de esta división y en función de su diseño, pueden diferenciarse varios tipos de Cargadores. Los más importantes, teniendo en cuenta su utilización actual son: Rectos y Curvos (de simple y doble hilera), tubulares, de tambor y tipo cinta.
Algunas referencias históricas
Los peines pueden considerarse los primeros Cargadores de la Historia. Estos particulares dispositivos permitían al Tirador agrupar un pequeño número de cartuchos para la carga de los primeros rifles de pólvora sin humo. El legendario rifle estadounidense M1 Garand fue uno de los que utilizaba este tipo de Cargador. Su principal inconveniente llegaba cuando se vaciaba el peine, ya que tras el último disparo el peine saltaba del Arma produciendo un notable ruido que podía alertar al enemigo de que su oponente se había quedado sin munición.
Actualmente, los peines, también conocidos como clips, se utilizan en la mayoría de los Cargadores empleados en los rifles de asalto militares. Estos dispositivos permiten al Tirador cargar su Arma con múltiples cartuchos a la vez.
Tipos de cargadores
Cargadores de caja rectos y curvos (de simple y doble hilera)
Cargadores rectos: En línea (arriba) y tresbolillo (abajo). A pesar de tener dimensiones similares, las capacidades difieren notoriamente debido a las diferencia de diseño. En el primer caso 9 cartuchos y en el segundo 17
Se trata del tipo de Cargador más popular y utilizado en los rifles modernos y la mayoría de Armas Cortas. Los Cargadores de Caja almacenan la munición en una columna recta o curva, simple o doble, apilando los cartuchos uno encima del otro. Este hecho permite que las balas de los cartuchos almacenados puedan montar una punta dura y con forma cónica, lo que contribuye a aumentar la precisión del Arma. Los cuerpos de este tipo de Cargadores pueden formar parte del Arma o bien ser totalmente desmontables.
Los Cargadores internos aparecen en numerosos rifles de cerrojo previos a la Segunda Guerra Mundial, así como en algunos modernos rifles de cerrojo destinados a la caza. Por otro lado, los desmontables, permiten al Tirador cargar o descargar al Cargador fuera del Arma. Cuando el Cargador se vacía, elTirador sólo tiene que retirarlo del Arma y sustituirlo por otro que esté lleno. Este hecho acelera notablemente el proceso de recarga del Arma, lo que permite al Tirador disponer de un gran cantidad de munición en un corto período de tiempo. Es de hacer notar que esta maniobra puede ser realizada mediante técnicas apropiadas (entrenamiento exhaustivo mediante) y desarrolladas especialmente a tal fin, con lo que se puede lograr disminuir el tiempo empleado en forma considerable.
Esto puede ser realizado con ambas manos o con una sola (hábil o no hábil) en caso de que el Tirador se encuentre imposibilitado o herido.
En caso de que el Arma utilice munición con reborde es necesario que el Cargador sea ligeramente curvo. En determinadas armas es posible unir dos o más cajas de Cargadores desmontables, lo que aumenta enormemente la capacidad de fuego disponible. Esto puede realizarse simplemente mediante el uso de cinta aisladora plástica o de ciertos accesorios fabricados a tal efecto.
Constan de cuatro partes principales:
- Cuerpo: Contiene los cartuchos y guía el muelle. Los labios son parte de él, y consisten en un doblez en la parte superior que impide que los cartuchos salgan hacia arriba por la fuerza del muelle pero permite su extracción si se empujan desde el culote hacia adelante. Esta acción es realizada por el block de cierre en el movimiento que forma parte del ciclo de alimentación.
- Elevador: Es una simple pieza metálica o plástica que permite que el muelle empuje uniformemente los cartuchos. En Cargadores de doble hilera, guía la introducción de los dos primeros cartuchos para que queden correctamente orientados. En algunos modelos, el elevador tiene la función secundaria de bloquear la corredera del Arma cuando se ha agotado la munición. Esto permite darse cuenta que se ha agotado la munición antes de que sea demasiado tarde. En la mayor parte de las Armas actuales, además permite que cuando se inserte un Cargador lleno no sea necesario volver a montar el Arma siendo suficiente con pulsar el botón de desbloqueo.
- Resorte o Muelle: Como su nombre indica, es un resorte de considerable longitud que empuja al elevador y consecuentemente a los cartuchos contra los labios del Cargador. Con respecto al muelle o resorte es muy importante hacer notar el tema tan mentado del ?cansancio? o fatiga que puede sufrir, debido a estar sometido a su máxima compresión durante un prolongado período de tiempo. Este es un hecho real y no debe ser menospreciado. Hay quienes para evitarlo, o mejor dicho minimizarlo, cargan el Cargador con una cantidad menor de cartuchos. En mi modesta opinión me parece que es desperdiciar justamente una de las características más importantes de nuestra Arma: la capacidad de su Cargador. Creo que cuando un Cargador ha llegado al término de su vida útil, es simplemente hora de cambiarlo. Además si consideramos el costo en relación con el costo de la munición, podemos decir que a lo largo del servicio que nos ha prestado, su valor ha sido ampliamente amortizado.
- Base: Es una pieza de metal o plástico que encaja en las guías de la parte inferior del cuerpo del Cargador. Su función es cerrar la parte inferior del cuerpo y soportar el empuje del muelle hacia abajo en contraposición a la elevación de los cartuchos. Generalmente son desmontables.
Despiece de un Cargador donde se pueden apreciar las distintas partes que lo componen: cuerpo, resorte, elevador y base
Existen como complemento, unos útiles para facilitar el relleno de los Cargadores vacíos. No son parte de los complementos habituales y están pensados para llenar varios Cargadores sucesivamente, evitando así la fatiga del Tirador. La excepción son los Cargadores circulares, que suelen llevar una "llave", separada o formando parte integrante del mismo, para tensar y bloquear el muelle. La introducción de cartuchos se facilita enormemente al no tener que luchar contra el potente resorte espiral que poseen.
Cargadores calibre .22: Carabina Halcón 20 cartuchos, resorte en espiral (arriba), Pistola Ballester Molina 10 cartuchos, resorte en zig-zag (centro), pistola Bersa 10 cartuchos, resorte en espiral (abajo)
Cargadors de pistola Glock .45 ACP, de 13 y 28 cartuchos
Este curioso cargador hace pensar seriamente en su utilidad práctica pero funciona a la perfección haciendo bajar el centro de gravedad del arma
Cargadores rectos tipo tresbolillo. Sus dimensiones son similares sin embargo el de la izquierda (Glock 45) tiene capacidad de 13 cartuchos. El del centro (Tanfoglio .45), 10 cartuchos. El de la derecha (Bersa 9mm) de 17 cartuchos.
Cargadores tubulares
Este tipo de Cargador era el utilizado por los primeros rifles de repetición, sobre todo, por los modelos de palanca y algunos semiautomáticos. Consiste un tubo en el que se almacena la munición. Este tubo suele ir colocado en paralelo debajo del cañón. Este tipo de Cargador suele aparecer fijado al Arma, lo que significa que no pude desprenderse fácilmente.
En estos Cargadores la munición no permite el diseño rectilíneo. Munición con vainas cónicas o con reborde generan la necesidad de diseños curvos. La excepción es el caso del modelo central (Cargador de fusil FAL, 20 cartuchos 7.62 x 51 mm.), es recto aunque la vaina de su munición es cónica. La solución a este problema es que su base es inclinada, no en ángulo recto
Hoy en día, todavía pueden encontrarse numerosos Cargadores tubulares, sobre todo en escopetas y aquellas Armas que utilizan munición con punta chata. Este es un requisito fundamental para evitar el riesgo de percusión en forma accidental por un golpe, caída o producto del mismo retroceso. En el caso de los rifles .22 con este tipo de cargador, no existe riesgo debido a que la munición es de fuego anular.
Cargadores de tambor
Este tipo de Cargadores son utilizados en numerosas ametralladoras ligeras, subfusiles y escopetas, el Cargador de tambor presenta un aspecto exterior cilíndrico e interior en espiral, en donde se almacenan los cartuchos de forma paralela al eje de rotación. Su diseño permite mayor capacidad de almacenamiento en comparación con los Cargadores rectos o curvos, sin que por ello sus dimensiones aumenten excesivamente. Ahora bien, su complejo sistema de funcionamiento puede provocar algunos problemas de fiabilidad. Muchas Armas alimentadas con Cargadores de Tambor no pueden cargarse con Cargadores convencionales, como por la escopeta DAO-12.
El más conocido de los Cargadores de este tipo, es el del subfusil Thompson. El Thompson es un Arma de gran calidad pero de caro mecanizado y muy pesada. Con el gran Cargador circular y sus 50 cartuchos calibre .45 ACP dentro, debía ser incómodo de manipular. A cambio su estabilidad en ráfagas era notable. La versión militar llevaba un Cargador recto convencional (de 20 / 30 cartuchos), aunque podía usar ambos tipos. Cuenta con una manivela tensora -para cargar- la guía espiral para los cartuchos y el rotor cargado con un muelle espiral cuyas 6 aspas empujan los cartuchos. Es de hacer notar que también se fabricaron para 100 cartuchos.
Los Cargadores de Tambor tienen una gran capacidad para el tamaño que ocupan (Generalmente 50 a 150 cartuchos) pero por esa misma razón son muy pesados (especialmente llenos) y necesitan medios mecánicos para tensar el poderoso muelle necesario para mover tal cantidad de cartuchos.
Cargadores de tipo cinta
Utilizados en la mayoría de ametralladoras modernas, en este tipo de Cargadores, los cartuchos aparecen totalmente unidos. La Cinta alimenta al Arma al mismo tiempo que los eslabones que unen los cartuchos se desarman o bien son expulsados por el lado opuesto de la recámara. Aventajan en capacidad a todos los otros tipos de Cargadores.
Conclusión
Desgraciadamente, los Cargadores no pueden hacerse de cualquier longitud que necesitemos.
Cuanta mayor capacidad poseen, más potente debe ser el muelle (y más si además tiene que forzar los cartuchos a través de una curva bastante cerrada).
El resultado es que debe realizarse un gran esfuerzo para introducir los últimos cartuchos en el Cargador. A menudo son necesarios útiles especiales para llenarlos.
Esta misma fuerza es la que ejerce el cartucho contra los labios del Cargador. Cuando supera un cierto nivel, el Arma no tiene suficiente energía para extraer el cartucho. Imponderables como una carga ligeramente menos potente producirán el encasquillamiento. Excepcionalmente, la corredera puede abollar un cartucho cuando solo tiene fuerza para extraerlo parcialmente.
Lógicamente, la correcta limpieza de un Cargador tan grande es imprescindible para que funcione eficazmente. También pecan por el extremo contrario. Cuando quedan pocas balas en el Cargador, el muelle ejerce poca fuerza. Es casi imprescindible que sea así, pues es la única forma que la tensión sea razonable cuando está lleno. Esto puede provocar problemas de alimentación con los últimos cartuchos del Cargador, especialmente si ha estado mucho tiempo lleno y el muelle ha perdido tensión.
Son frecuentes los casos de Armas con Cargadores de gran capacidad en que al final debió admitirse que la única forma de que funcionasen sin problemas era no rellenarlos al máximo de su capacidad.
Por último, cabe destacar también que a partir de cierto tamaño, las ventajas de la capacidad se anulan con los inconvenientes del elevado peso y volumen. Por todo ello es raro encontrar hoy en día cargadores de más de 20-30 cartuchos. Quedarán para el recuerdo y como codiciado botín de todo coleccionista de Armas que se precie de tal.
Y por sobretodo recordemos que los Cargadores son elementos "DESCARTABLES", al término de su vida útil, no deben ser reparados ni reciclados, sino "REEMPLAZADOS". Nuestra vida y/o las de las Personas que tengamos a nuestro cargo pueden depender de esta decisión.
Nota: Mi especial agradecimiento a mis Amigos de "Armería El Rafa", que con su inestimable colaboración, hicieron posible la realización de este Artículo.
FullAdventure
No hay comentarios:
Publicar un comentario