La batalla de Tuyuty fue de lejos el encuentro más grande de la guerra. Casi 60.000 tropas participaron en el combate. Se nombró por un extenso campamento de tiendas de campaña hacia el norte del Estero Bellaco donde las fuerzas aliadas se habían establecido a finales de Abril.
Después del encuentro del 2 de mayo, grandes fuerzas de unas 18.000 tropas, manejadas por el general Antonio Paranhos, vizconde de Porto Alegre, marcharon bordeando el río de Paraná que las confinaba, mientras que la mayor parte del ejército aliado, unas 35.000 tropas, seguían hacia el norte del Estero Bellaco y acampaban allí. El ejército brasileño, manejado por el general Osório, ocupó la parte del terreno próxima de Estero Bellaco y el argentino fue situado a la derecha. Los batallones uruguayos, con el 41vo batallón de infantería del ejército imperial, estaban delante del ejército aliado, hacia el sur de Tuyuty. El comandante aliado, general Bartolomé Mitre, todavía estaba preocupado con preveer la acción del enemigo. La acción a comienzos de mayo y las constantes escaramuzas, era evidencia que no llevaría el a los paraguayos tan fácilmente. Había también rumores de un ejército enemigo grande que esperaba una ocasión favorable para enfrentarlos. Para hacer cosas las peores, la flojedad diezmaba a sus grados. Las enfermedades causaron más bajas que las balas hicieron.
López, para su giro, llamó a sus oficiales para discutir la situación. Él se sentía confiado de hacer retroceder a los aliados, hacia las aguas de Paraná. En Tuyuty, los refuerzos de otros puntos del país hincharon a sus grados a más de 23.350 hombres. Él proyectó un asalto directo en las posiciones de la Triple Alianza. Este ataque iba a tener además el apoyo de cañones pesados. La izquierda fuerte 9.000 de sus tropas mantendría las fuerzas argentinas dedicadas. Serían llevadas por general Francisco Isidoro Resquin, que tendría en su disposición el bulto de la caballería paraguaya. A la derecha, general Vicente Barrios, con un número igual de tropas, pondría en marcha un asalto directo en el ejército brasileño. En el centro, Díaz, ahora ascendido al general, tenía el objetivo de destruir la vanguardia de los aliados. Al mismo tiempo él ayudaría a Barrios a romper la izquierda aliada. Él ordenaría a 5.000 hombres. Una pequeña reserva retrocedería el ataque, en caso de necesidad.
Para algunos oficiales, estaba claro que el ataque era una equivocación. Tendrían que cruzar una tierra desigual, contra un enemigo atrincherado con poco apoyo de sus propios cañones. George Thompson, ingeniero inglés que luchó en el ejército de López como teniente coronel, conocido más adelante que El Supremo, hubiera decidido para una estrategia defensiva, los paraguayos hubieran infligido una gran derrota a los aliados, puesto que el terreno era apropiado para los defensores. A pesar de eso, López estaba resuelto. El ataque ocurriría el 24 de Mayo.
Entretanto, los aliados pasaron sus trincheras de excavación del tiempo. En la izquierda del campamento aliado la artillería estaba bajo mando de capitán Emílio Mallet, hombre de mediana edad francés que se había unido al ejército imperial. Estaba preocupado de sus piezas puesto que su posición estaba al finalizar el Estero Bellaco. Un ataque de ese punto o de una maniobra del flanco pondría los cañones en peligro serio. Cerca de su posición las 1ras y 3ro divisiones de infantería formaron el extremo a la izquierda del ala.
Díaz abrió el ataque sobre el 11:30. Rompió arriba en la vanguardia del ejército aliado. Los hombres de Flores eran de nuevo las receptores iniciales para experimentar la acometida paraguaya. Comenzaron a ser echado hacia atrás por la presión de los asaltadores.
En la izquierda del campamento aliado las unidades del ejército imperial estaban bajo ataque de los soldados de infantería de los paraguayos. Aquí, el terreno hizo la batalla un tumulto desde el principio. Los paraguayos se movían delante bajo fuego cercano de las líneas enemigas. Pronto, se ponía de manifiesto que los asaltadores se movían para flanquear a los aliados. La artillería del centro estaba en peligro. La 3ra división dispuso a algunos batallones proteger la posición la artillería. Por esa razón, sufrirían la mayor parte de los ataques.
Mapa de la batalla
Mapa de la batalla de Tuyuti, extraído del trabajo de Williams. Lo rojo muestra el ataque paraguayo. El rectángulo celeste indica las posiciones argentinas.
A la derecha, las cosas no vinieron tan bien a la fuerza atacante. Primero, el terreno estaba lleno de obstáculos para un asalto de la caballería. Era pantanoso y los asaltadores tuvieron que desviarse de centros comunes y de matorrales. Otra razón de las dificultades que los paraguayos eran cara tuvo que hacer con el hecho de que el argentinos desplegaron rápidamente a sus tropas en líneas del batallion. Sin embargo, los asaltadores se dirigieron hacia la artillería y luego esperan por algún tiempo, pero un contraataque de la caballería argentina bajo el mando del General Wenceslao Paunero pronto los expulsa.
General Osorio (EB)
General Díaz (EP)
Mientras tanto, Díaz había unido a los paraguayos en su tentativa de romper la formación brasileña y de alcanzar la parte posterior del campamento aliado.
El extremo a la izquierda de los aliados fue dedicado a un combate desesperado para no estar implicado. Ambos, los soldados de infantería paraguayos y brasileños trataban con descargas constantes en uno a en una distancia corta. Cuando los paraguayos estaban a punto de alcanzar su meta, algunas unidades traídas del centro vinieron en el 1r y las 3ro divisiones a ayudar. Así, los defensores pudieron repeler el asalto. Para las 4 de la tarde los paraguayos se retiraron. No habían alcanzado sus objetivos.
Tuyuty representó un desastre inmenso para el ejército paraguayo: casi la mitad de la fuerza que atacaba fue perdida. Según algunas fuentes, los paraguayos tuvieron 6.000 muertos y 6.000 heridos o capturados.
Aniquilaron a algunos batallones. Por el resto del conflicto, López no podría colocar a un ejército como el que tuvo en Tuyuty.
Los aliados también tenían un gran costo de bajas. Las bajas sumaron unos 4.000, el 11% de los efectivos. Para el ejército imperial las bajas estaban: 719 a 736 muertos y 2.292 heridos. El general de brigada Antônio Sampaio, comandante de la 3ra división estaba entre los muertos. El argentinos tuvieron 126 muertos y 480 heridos. Para los uruguayos, las bajas contadas hasta 429, de este número, cerca de 133 fueron muertos.
Las bajas combinadas fueron tan altas como 16.000. Alrededor 3.550 bajas fueron sostenidas por cada hora de la batalla. Tuyuty fue el día más sangriento de la guerra.
López marchó hacia el norte al área fortificada de Humaitá. Demostró ser un obstáculo serio para la fuerza aliada. Sin embargo, después de Tuyuty los aliados se colocaron firmemente en el territorio enemigo. La marea de la guerra cambio a favor de las fuerzas de la Triple Alianza.
Episodio de la 2da División Buenos Aires en la batalla de Tuyutí, Mayo 24 de 1866, República del Paraguay (1876-1885)
Detalle de la caballería paraguaya
Fotos de soldados uruguayos del Batallón 24 de Abril en la trinchera de Tuyuty.
Y oficiales argentinos también en Tuyuty
Referencia
- John Hoyt Williams, The battle of Tuyuti: 'A swamp of blood'. Military History; Apr 2000; 17, 1; Military Module pg. 58
- http://www.geocities.com/ulysses_costa/tuyuty.html
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