Q-SLAM-40: El dron kamikaze hecho en España
Antonio Esteban López || Defensa
La munición merodeadora es
artillería volante. Es la fuerza aérea de los mandos de las tropas
terrestres. En el futuro será el método más directo para destruir al
enemigo y controlar el campo de batalla. El desarrollo de la munición
merodeadora constituye un formidable multiplicador de fuerza y será un
elemento esencial para la victoria (Shankar Prasad, teniente general (retirado) del Ejército de la India.)
La denominada munición merodeadora, popularmente conocida como dron suicida o kamikaze, se refiere a un sistema de armas que podríamos considerar híbrido entre los vehículos aéreos no tripulados, los conocidos UAV (Unmaned Aerial Vehicle) y las municiones inteligentes (proyectiles que pueden corregir su trayectoria para alcanzar el objetivo).
En
este artículo expondremos las características de un diseño netamente
español, que trata de abrirse paso en un efervescente segmento de gran
interés y segura expansión. Se trata del Arquimea Q-SLAM-40 de 40 mm., queriendo decir SLAM (Surgical Loitering Airborne Munition).
Un poco de historia
El concepto de loitering munition comenzó a tomar carta de naturaleza en la década de los ochenta del siglo pasado con algunos programas como el AGM-136 Tacit Rainbow de Estados Unidos y los israelíes IMI Delilah e IAI Harpy.
Estos
primeros desarrollos surgieron con un objetivo muy específico: la
supresión de las defensas aéreas enemigas. Más adelante, a comienzos del
siglo XXI, el espectro se fue ampliando y empezaron a concebirse
ingenios con un amplio abanico de posibilidades, combinado diversos
parámetros: objetivos, potencia, autonomía, alcance…
La
denominada 2ª Guerra del Alto Karabaj constituyó un breve conflicto
armado (27 de septiembre a 10 de noviembre 2020) que, una vez más, enfrentó a las irreconciliables republicas de Armenia y Azerbaiyan.
Aunque el resultado de las hostilidades no puede considerarse decisivo
en cuanto a la resolución del conflicto, lo cierto es que, en esta
ocasión, la balanza se inclinó a favor de Azerbaiyan, que consiguió
importantes ganancias territoriales. Una de las claves del éxito fue sin duda el masivo empleo de UAV y munición merodeadora.
Aunque
ambos bandos disponían de este tipo de ingenios, Azerbaiyan tenía más y
mejores. Las Fuerzas Armadas azeríes emplearon los UAV
suicidas con notable éxito, para, en primer lugar, destruir las defensas
antiaéreas enemigas, lo que posteriormente permitió usar todo tipo de
aeronaves –tripuladas o no– con mayor libertad de acción y eficacia. De
esta forma, unos sistemas de armas relativamente económicos
proporcionaron una ventaja estratégica que marcó el devenir y conclusión
del efímero conflicto.
Este
enfrentamiento armado –aunque breve y de alcance limitado– ha venido a
certificar la utilidad de una tecnología barata, de fácil acceso y de
sencillo empleo. Ahora la guerra de Ucrania está confirmando que los UAV son un arma del presente y están llamados a ser del futuro.
La contienda ruso-ucraniana es la desinformación en estado puro y por
ello las noticias que nos llegan hay que someterlas a prudente
cuarentena y analizarlas con las debidas reservas.
Sin embargo, aunque alguna información pueda haber sido deliberadamente exagerada, parece que la eficiencia de los UAV está fuera de toda duda y que su papel está siendo muy relevante. Los ucranianos disponen de una flotilla internacional de UAV entre los que destacan los estadounidenses Switchblade 300/600, el turco Bayraktar TB2 y el Leleka-100 de fabricación ucraniana.
Por su parte los rusos también están usando estos ingenios con modelos como el veterano Orlan-10 o el moderno Kalashnikov Kub. Hay
países, entre los que podemos citar a China, Estados Unidos, Federación
de Rusia, Israel, Irán, Taiwan o Turquía que tienen tecnología y
producción propias, y otros como Alemania, Azerbaiyan, Corea del Sur o
India, que comienzan a poner en marcha sus propios programas.
En
este contexto, el 12 de octubre del pasado año, la compañía alemana
Rheinmetall y la israelí UVision Air hicieron pública su alianza para el
desarrollo de munición merodeadora. Tras la firma del acuerdo, el
gigante germano de la defensa realizó una declaración oficial en la que
manifestaba que a través de esta asociación, Rheinmetall y UVision
ofrecerán, en el campo de la munición merodeadora, soluciones integrales
para las Fuerzas Armadas de Europa.
Los
alemanes aportarán su potencia industrial y su posicionamiento en el
mercado, mientras que los israelíes harán lo propio con su tecnología y
experiencia. UVision puede ser considerada una de las
compañías líderes en este tipo de productos. Fundada en 2011, desde sus
inicios pone a punto su programa de munición merodeadora Hero. La serie Hero desarrolla diversos tipos dentro de esta clase de munición: ligera portátil (H-20 y H-30), corto y medio alcance (H-40 y H-70) y largo alcance (H-250, H-400, H-900 y H-1250).
Para finalizar este apartado, parece oportuno mencionar que Marruecos
también está apostando por estos sistemas de armas y ha llegado a un
acuerdo con otra empresa israelí, en este caso la pública IAI (Israel Aerospace Industries), para el suministro de UAV suicidas (incluyendo la fabricación conjunta de aparatos de la clase Harop en suelo marroquí).
El caso es que este sistema de armas –llámesele munición merodeadora o UAV kamikaze
– se ha puesto de moda y, al menos a corto plazo, está generando
grandes expectativas. Se trata de un producto barato y de fácil manejo
que, además de proporcionar notables ventajas en el campo de batalla,
representa un menor riesgo para los operadores, que pueden mantenerse a
considerable distancia de la primera línea de combate.
El Q-SLAM-40
Hecha esta introducción, pasemos a analizar el desarrollo español de Arquimea Q-SLAM-40,
que también busca su línea de avance en este frente de batalla. En
primer lugar, efectuaremos una breve descripción del sistema, enunciando
sus partes constitutivas para, a continuación, hacer algunas
consideraciones sobre sus características y posibilidades de empleo.
Es
un arma ligera de empleo táctico que se maneja con un equipo de 2
operadores militares: de control y de lanzamiento. Con un peso total de
28 kg. se transporta en 2 mochilas diseñadas al efecto, una para la
estación de control y el lanzador y otra para la munición (3 disparos).
El sistema a su vez se divide en 3 subsistemas: la plataforma aérea, la
estación de control y el dispositivo de lanzamiento.
La plataforma aérea no es otra cosa que la munición propiamente dicha. Se trata de un UAV
equipado con los correspondientes sistemas de navegación y propulsión
pero que, además, ha sido armado con una cabeza de guerra,
convirtiéndose así en munición merodeadora. El diseño, en cuanto a
aeronáutica se refiere, no difiere mucho de una aeronave no tripulada
clásica. Consta de un fuselaje con dos alas de igual tamaño, que se
sitúan en la parte superior delantera e inferior trasera; estas alas
permanecen plegadas durante el transporte y se despliegan
automáticamente cuando el aparato comienza el vuelo. La propulsión la
proporciona un pequeño motor eléctrico instalado en la popa.
El Q-SLAM-40 está
equipado con un sistema de navegación con sensores inerciales, lo que
le proporciona una gran fiabilidad en la trayectoria y estabilidad en
vuelo. Además, dispone de un sistema de video HD con capacidad
de transmisión de imágenes en tiempo real. La plataforma transporta una
cabeza de guerra compuesta por una granada explosiva de 40 mm. y una
espoleta electrónica de alta seguridad.
El
operador siempre mantiene el control de las operaciones: armado y
desarmado de la espoleta, detonación por control remoto o por impacto
dirigido, o neutralización del artefacto explosivo. si hay que abortar
la misión.
La estación terrestre de control
es el subsistema que, mediante las correspondientes aplicaciones de
mando, control y comunicaciones permite operar todo el dispositivo:
vuelo, información y ataque. Consta de 2 componentes: un terminal
operativo y una antena de comunicaciones.
El primero, del tipo tableta, resistente a golpes y condiciones adversas (rugerizado), consta de una pantalla
y una serie de mandos de control que permiten un fácil e intuitivo
manejo. La antena ha sido especialmente diseñada para asegurar la
transmisión de datos a las distancias requeridas. El dispositivo de
lanzamiento permite el despegue de la plataforma aérea en cualquier
momento o situación. Se trata de un artefacto ligero de fácil transporte
y rápido asentamiento gracias a sus patas retráctiles. La proyección
inicial se consigue gracias a un sistema neumático (émbolo y válvulas
electrónicas), que proporciona la energía necesaria para que el aparato
inicie la fase de vuelo.

Secuencia de lanzamiento del Q-SLAM-40 (foto Arquimea Aerospace & Defence).
Características y posibilidades
Q-SLAM-40 es un acrónimo que equivale a la siguiente expresión: Arquimea–Surgical Loitering Airborne Munition 40 mm.
Estas siglas nos servirán para estructurar nuestra exposición con los
elementos que nos proporcionarán una imagen completa del producto, sus
características y posibilidades de empleo. La Q es la letra que ha sido elegida por Arquimea Group como seña de identidad para distinguir sus productos más emblemáticos.
Se
trata de una empresa 100 por ciento española, que se presenta a sí
misma como un grupo tecnológico internacional transversal que desarrolla
soluciones y productos innovadores en sectores de actividad de alta
exigencia. Tieneuna división denominada Arquimea Aerospace
& Defence que, como su propio nombre indica, se especializa en el
diseño y desarrollo de productos y sistemas destinados a cubrir las
necesidades de los sectores aeroespacial, de seguridad y de defensa.
Esta división mantiene desde hace años un programa específico de vehículos aéreos no tripulados. La incursión en el mundo de los UAV se inició con uno de observación denominado Shepherd-MIL,
que posteriormente se rediseñó para ser empleado como furtivo
observador avanzado, con capacidad de monitorizar y corregir desde el
aire el fuego de morteros o artillería. Hace aproximadamente 4 años, a
partir de la experiencia adquirida con el Shepherd-MIL, comenzó a desarrollarse el Q-SLAM-40
como sistema de munición merodeadora, con el objeto de superar las
limitaciones de alcance y precisión que, en algunos casos, presentan los
fuegos terrestres.
La S es de Surgical (quirúrgico en español), un término que, según la segunda acepción del Oxford Advanced American English Dictionary,
se usa para describir algo que se hace de una forma muy precisa, y en
particular puede referirse a un ataque militar ejecutado con gran
precisión. Precisamente esta es una de las características más valoradas
en los UAV suicidas y que constituye su diferencial y
fundamental ventaja respecto a las municiones de trayectoria balística
(sean éstas tradicionales o guiadas).
Los
daños colaterales se entienden como aquellos efectos que se producen
durante una operación militar y que causan destrucción, heridos o bajas
mortales de forma no intencionada ni deseada. Estos daños son
extremadamente contraproducentes pues, además de constituir per se un trágico error, pueden traer consecuencias muy negativas en el desarrollo de las operaciones.
Así,
la muerte de civiles (mujeres, ancianos, niños…) o la destrucción de
instalaciones especialmente protegidas (hospitales, colegios,
monumentos…) tiene perniciosos efectos, tanto en la moral de las tropas
como en la opinión pública. Por ello, especialmente en los conflictos
híbridos y asimétricos, es habitual que el adversario más débil trate de
provocar este tipo de daños para luego –exagerados o manipulados-
explotarlos a nivel propagandístico. La técnica más común es desplegar
combatientes en posiciones situadas en la inmediata vecindad o incluso
en el interior de instalaciones sensibles o zonas habitadas.
Así,
si estas posiciones son atacadas, existe un alto riesgo de provocar
daños colaterales. Además, incluso aunque éstos no lleguen a producirse
realmente, siempre queda la posibilidad de simularlos e iniciar la
subsiguiente campaña de desinformación. El Q-SLAM-40 fue expresamente concebido para evitar daños colaterales golpeando sus objetivos con quirúrgica precisión.
El
producto ha sido diseñado bajo la premisa de que el control siempre
permanezca en manos de un operador, que será el último responsable de la
decisión de llevar a cabo el ataque. La plataforma dispone de un
sistema de navegación inercial y de uno de transmisión video HD.
En la primera fase de vuelo, la plataforma puede aproximarse en
automático hacia la zona de objetivos. En este tránsito, el operador de
la estación terrestre simplemente observa la ruta y, si fuese necesario,
podría introducir las oportunas correcciones para ajustar la
trayectoria.
Una
vez en zona, la cámara de video adquiere su verdadero protagonismo,
proporcionando las imágenes que permitirán al operador localizar y
guiarlo hacia el objetivo. Además, en función de las imágenes recibidas
en la pantalla, mantiene el control hasta el ultimo instante, pudiendo
abortar la misión si tiene dudas sobre el objetivo o si aprecia riesgo
de provocar daños colaterales. En caso de que el ataque se produzca, las
imágenes grabadas antes del impacto también sirven de prueba en caso de
que se generase alguna duda o polémica.
Memoreando por los aires
La L es de Loitering,
que es el gerundio del verbo inglés que en español se traduce como
merodear. En lo que concierne a nuestra exposición, la munición
merodeadora podría definirse como aquella que ha sido concebida para
moverse en una determinada zona con la finalidad de localizar,
identificar y neutralizar determinados objetivos. La característica
esencial de este sistema de armas se inspira en algunas especies
animales que practican la caza al acecho.
En
la naturaleza es un depredador que se mueve en un territorio donde sabe
de la presencia de otros animales que le sirven de alimento. El
merodeador recorre su territorio de caza observando y buscando con
paciencia y, una vez localizada la presa, se aproxima con sigilo y
finalmente se lanza sobre su objetivo. Esta misma técnica de acecho
(localización, identificación y ataque) es la que se aplica en el empleo
de la munición merodeadora, solo que en este caso los objetivos son
militares y el lance corre a cargo de un vehículo aéreo no tripulado
manejado por control remoto.
La
ventaja de esta técnica es que facilita la vigilancia de una
determinada zona, así como la exacta localización e inequívoca
identificación de los objetivos, todo ello en pro de una mayor precisión
y eficacia, pero, además, el procedimiento permite efectuar las
oportunas valoraciones y consideraciones antes de tomar la decisión del
ataque final. El Q-SLAM-40 tiene una autonomía de vuelo de 12 min. y un radio de acción de 6 km., parámetros que determinan su capacidad de merodeo y, por ende, los límites de su territorio de caza.
Es
cierto que estos datos imponen ciertas limitaciones en cuanto a
posibilidades de empleo, pero también lo es que se trata de un arma
ligera de empleo táctico. Para una pequeña unidad envuelta en una acción
de combate próximo, 6 km. es una distancia más que respetable y 12 min.
una eternidad.
La A proviene de Airborne (aerotransportado) o más simplemente como aéreo. Esta característica resulta una obviedad, pues efectivamente el Q-SLAM-40
no es sino un vehículo aéreo no tripulado con una cabeza de guerra a
bordo. Sin embargo, el asunto no es tan trivial, si tenemos en cuenta
que el carácter aéreo constituye la esencia de la munición merodeadora.
El vuelo controlado es el factor que permite merodear: localizar, identificar y atacar. El del Q-SLAM-40 se
dirige desde una estación de control terrestre, mediante la cual el
operador puede introducir los datos e instrucciones que considere
oportunos. Además del control manual, el sistema ofrece un total de 5
modalidades plan de vuelo automático (previa introducción de los
correspondientes parámetros):
- A destino: La plataforma vuela a un punto final a la espera de nuevas instrucciones.
- En circuito: Siguiendo uno predeterminado que repite hasta la llegada de nuevas instrucciones.
- Merodeador: Va hasta una zona donde comienza a merodear siguiendo una órbita predeterminada.
- De ataque: Sigue una trayectoria de impacto para alcanzar un objetivo previamente identificado.
- Ruleta: La plataforma vuela orbitando en las proximidades de la estación de control, a la espera de recibir instrucciones.
Además
de estas opciones, en la fase de ataque ofrece 2 modalidades de
aproximación final, en función de las características y ubicación del
objetivo:
- Ataque
estándar: El objetivo se ubica en un terreno abierto (campo con escasa
vegetación, páramos, estepas, zonas desérticas…) sin grandes obstáculos a
su alrededor. El aparato sigue trayectorias de aproximación con cierta
horizontalidad, donde predomina el planeo y ligeras correcciones en
altitud y deriva.
- Ataque
táctico. El objetivo se ubica en algún punto de difícil acceso (zonas
urbanizadas, alta densidad de obstáculos naturales o artificiales…). El
aparato sigue trayectorias de aproximación abruptas, donde predominan
los giros y picados.
Pero, en lo que a vuelo y trayectorias se refieres, quizá la característica más relevante del Q-SLAM-40 es
que el operador siempre mantiene el control, pudiendo abortar un ataque
en el ultimísimo instante. En este punto cabe decir que el sistema –con
unos ligeros ajustes de software– podría ser adaptado para
convertirse en munición autónoma con capacidad para, una vez
introducidos los parámetros iniciales, tomar sus propias decisiones. Sin
embargo, se ha preferido apostar por la modalidad conocida como man in the loop (hombre en el bucle”).
Con este modus operandi
la responsabilidad y decisión final siempre queda en manos de una
persona que, en función de diversos criterios y consideraciones
(identificación segura del objetivo, rentabilidad del ataque, daños
colaterales…), podrá abortar o confirmar el impacto. Piénsese que, una
vez dadas las instrucciones iniciales, el ataque con munición totalmente
autónoma podría ejecutarse en automático, sin tener en cuenta factores
que podrían desaconsejarlo. De momento, circunstancias como la presencia
de civiles, la proximidad de tropas propias, la rendición de los
combatientes enemigos y otras situaciones análogas solo pueden ser
debidamente valoradas por un ser racional con ciertos principios éticos.
Munición
La M de Munition equivale a munición. En principio, etiquetar al Q-SLAM-40
simplemente como eso pudiera antojarse un tanto degradante para un
producto tecnológico de notable complejidad conceptual y novedosas
posibilidades operativas. Parece que el calificativo de UAV suicida o kamikaze hubiese sido más digno y apropiado, pues el sistema tiene mucho en común con vehículos aéreos no tripulados.
La
cuestión de la denominación no es tan simple como pudiera parecer y
veremos a continuación que todo tiene su explicación. Los UAV
tiene la consideración legal de aeronaves y, por tanto, están sometidos a
un sinfín de regulaciones, tanto relativas a la certificación de los
aparatos como a las licencias necesarias para su pilotaje.
Sin embargo, la munición merodeadora no aspira a ser aeronave ni a ser manejada por un acreditado piloto. Su
vuelo –en gran parte automático– no ha de considerarse un fin en sí
mismo, sino una herramienta que permite llevar una cabeza de guerra
hasta un objetivo. Se trata de plataformas aéreas de un solo
uso y con características muy singulares: el despegue se realiza
mediante la impulsión de un dispositivo de lanzamiento, la fase de vuelo
se realiza preferentemente en automático y el aterrizaje –por razones
obvias- no se contempla. En definitiva, y sin entrar en más
disquisiciones, la categorización como munición parece la más acertada y
eficiente.
40 es simplemente el calibre en mm. de la granada,
cuyo radio de acción letal es de 10 m. La cabeza de guerra se completa
con una espoleta electrónica de alta seguridad. El operador, desde la
estación de control terrestre, puede en todo momento enviar
instrucciones para armar o desamar la espoleta, haciendo que la cabeza
de guerra quede activada o no a voluntad. Adicionalmente, el sistema
incorpora una medida que garantiza la seguridad de los operadores. Si la
plataforma se encuentra a menos de 200 m. de la estación de control,
resulta imposible armar la espoleta por lo que la cabeza de guerra queda
inerme.
La
munición, por su reducido calibre, está pensada para ser empleada
contra combatientes aislados o pequeñas unidades no protegidas (personal
al descubierto, posiciones defensivas con fortificación ligera, nidos
de ametralladoras, puestos de francotiradores…).
Adicionalmente, el Q-SLAM-40 puede ser empleado para destruir elementos esenciales (antenas,
sensores, radares, fuentes de alimentación, depósitos inflamables…) de
sistemas de armas complejos. En este contexto podría ser utilizado para
dejar fuera de servicio –al menos transitoriamente– instalaciones
críticas (puestos de mando, centros de transmisiones…), así como
vehículos terrestres, aeronaves e incluso buques de pequeño porte.

El
armado (introducción de la carga explosiva) se puede hacer instantes
antes del lanzamiento (foto Arquimea Aerospace & Defence).
Conclusiones
Hecho este primer análisis y en virtud de todo lo dicho podemos extraer las siguientes conclusiones sobre el Q-SLAM-40:
- Investigación+Desarrollo+Innovación:
No podemos decir que se trate de un invento revolucionario pues, desde
hace unos 10 años, vienen apareciendo en el mercado productos similares.
No obstante, debemos poner en valor este prototipo por tratarse de un
desarrollo 100 por ciento español, tanto en tecnología como en
fabricación.
- Posibilidades
de empleo: Se trata de un producto ligero y compacto, que puede tener
una gran utilidad para resolver determinadas situaciones a nivel
táctico. Es posible transportarlo a pie por un equipo de 2 efectivos y,
con las correspondientes adaptaciones, es capaz de integrarse en una
gran variedad de vehículos, desde los más ligeros cuatriciclos (los
conocidos quads) o los UTV (Utility Task Vehicles), tipo boogie” militarizado, a los tradicionales vehículos todo terreno, medios acorazados de toda clase, embarcaciones…
- Posibilidades de evolución: La posible evolución del sistema podría materializarse en varios frentes, entre otros estos:
- Diseño y construcción de modelos más pesados, con mayor alcance y potencia (emulando las series Hero de UVision).
- Diseño y construcción de lanzadores múltiples y sus correspondientes estaciones de control en shelter.
- Investigación y desarrollo para el lanzamiento desde el aire y enlace con estaciones de control terrestres.
- Investigación y desarrollo para la neutralización de objetivos múltiples mediante despliegue de enjambres.
(1)https://www.defencestar.in/defence-news/rheinmetall-uvision-join-hands-to-build-market-loitering-munitions-in-europe/5908/
(2)https://www.arquimea.com/.
(3)https://www.oxfordlearnersdictionaries.com/definition/american_english/surgical.