Mostrando entradas con la etiqueta análisis. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta análisis. Mostrar todas las entradas

domingo, 9 de febrero de 2025

EA/IMARA: Análisis de la combinación Stryker/Merkava

EA/IMARA: Blindados para el combate urbano

Por Esteban McLaren



Merkavas sobre las calles de Bahía Blanca

En el contexto de la modernización de las fuerzas terrestres argentinas, que incluye tanto al Ejército Argentino (EA) como a la Infantería de Marina Argentina (IMARA), el análisis de vehículos blindados como los Stryker y tanques Merkava Mk.4/Mk.5 resulta de alta relevancia estratégica y operativa. La naturaleza cambiante del combate, caracterizada por escenarios urbanos y amenazas asimétricas como explosivos improvisados (IEDs) y misiles antitanque, plantea la necesidad de reevaluar las capacidades actuales y considerar la incorporación de activos blindados avanzados presentes en el mercado.

Los blindados Stryker, con su capacidad modular de protección y movilidad en entornos urbanos, y los tanques Merkava, optimizados para el apoyo a la infantería y la evacuación bajo fuego, ofrecen soluciones versátiles. Ambos sistemas combinan protección avanzada con capacidades ofensivas y de apoyo que podrían elevar significativamente el nivel operativo de las fuerzas argentinas. Sin embargo, estas adquisiciones no están exentas de desafíos. Entre los principales beneficios, destaca el aumento en la capacidad de respuesta y protección frente a amenazas modernas. No obstante, los contras incluyen limitaciones en infraestructura nacional, como puentes y carreteras que podrían no soportar el peso de estos vehículos, así como los costos asociados al mantenimiento y la capacitación técnica requerida. Hay que tener presente que ambos vehículos son alimentados por motores de origen americano, en el caso del Stryker comparten motor con los camiones Oshkosh ya en servicio en el EA, con muy buena experiencia.

Por lo tanto, este análisis contribuye a fundamentar decisiones estratégicas sobre la actualización y adquisición de capacidades blindadas. Las fuerzas argentinas podrían no solo reforzar su capacidad disuasiva regional, sino también garantizar una mayor preparación para operar en entornos urbanos y geográficamente desafiantes. Este proceso requeriría una evaluación integral que equilibre las capacidades tecnológicas de los vehículos con las limitaciones logísticas y presupuestarias inherentes al contexto nacional.


Protección Un Stryker con blindaje en rejilla, un kit completo de protección del casco y un escudo balístico para el comandante.

El casco del Stryker está construido con acero de alta dureza, lo que proporciona un nivel básico de protección contra proyectiles de 14,5 mm en el arco frontal. Además, cuenta con protección en todo su contorno contra municiones de 7,62 mm. Los Strykers están equipados con un blindaje cerámico de instalación externa que ofrece protección contra munición perforante de 14,5 mm y fragmentos de artillería de 155 mm.

Se encontraron problemas con el lote inicial del blindaje cerámico, ya que algunos paneles fallaron en las pruebas contra municiones de 14,5 mm. Los oficiales del ejército determinaron que esto fue causado por cambios en la composición y el tamaño de los paneles introducidos por el fabricante, IBD Deisenroth. Como solución temporal, se añadió un blindaje de acero de 3 mm hasta encontrar una solución permanente. En 2003, se resolvió el problema seleccionando a DEW Engineering como proveedor exclusivo del blindaje cerámico.

En 2007, un Stryker fue volcado por un artefacto explosivo improvisado (IED). Toda la tripulación sobrevivió, aunque el vehículo necesitó ser reconstruido en fábrica antes de volver al servicio.

Además del blindaje cerámico integrado, se han desarrollado paquetes opcionales, que incluyen blindaje en rejilla y baldosas de blindaje reactivo (SRAT) para protección contra granadas propulsadas por cohetes (RPG) y otros proyectiles. También se incluye el kit de protección del casco (HPK), faldas blindadas para mayor protección contra dispositivos explosivos improvisados y un escudo balístico para proteger la escotilla del comandante.


APC M1126

El Ejército comenzó a enviar baldosas de blindaje reactivo a los Strykers en Irak en 2004, además de enviar baldosas para los tanques Abrams y los vehículos Bradley. Estas baldosas se fabrican específicamente para cada tipo de vehículo. Los insurgentes intentaron contrarrestar el blindaje reactivo disparando múltiples RPG al mismo tiempo, pero estos grupos podían ser atacados a corta distancia. El blindaje reactivo puede ser superado por armas de carga en tándem, como el RPG-29 o por penetradores formados explosivamente (EFP), aunque las baldosas del Bradley pueden resistir EFPs. En 2005, el blindaje en rejilla para los Strykers fue diseñado y desarrollado por el Laboratorio de Investigación del Ejército y el Centro de Pruebas de Aberdeen en Maryland, para proteger aún más contra RPGs.

La jaula de rejilla se coloca 50 cm delante del vehículo, permitiendo que la cabeza explosiva de un RPG detone a una distancia segura del vehículo. El blindaje en rejilla en los Strykers ha demostrado ser efectivo contra rondas HEAT. En mayo de 2009, General Dynamics y Rafael ganaron un contrato para proporcionar baldosas SRAT para reemplazar el blindaje en rejilla en los Strykers. Aunque el peso de ambos sistemas es comparable, las baldosas de blindaje reactivo ofrecen mayor estabilidad y maniobrabilidad del vehículo, y proporcionan una protección "asegurada" en lugar de "estadística".

El Stryker incorpora un sistema automático de extinción de incendios con sensores en el motor y compartimentos de tropas que activan botellas de halón, además de depósitos de combustible montados externamente y un sistema CBRN (químico, biológico, radiológico, nuclear) que mantiene el compartimento herméticamente cerrado y presurizado.

Informes de personal militar y analistas indican que el Stryker es superior a otros vehículos ligeros militares en términos de supervivencia frente a dispositivos explosivos improvisados (IEDs).

En la primavera de 2016, un regimiento Stryker fue desplegado en Europa con el sistema de camuflaje móvil (MCS) de Saab, el cual cambia la apariencia física del vehículo para mimetizarlo mejor en el entorno e incorpora propiedades que mejoran la gestión de firmas térmicas y de radar.

En 2016, se seleccionó el sistema de protección activa Iron Curtain de Artis LLC para integrarlo en el Stryker como sistema interino, hasta que el Ejército desarrollara el Sistema Modular de Protección Activa (MAPS). Iron Curtain destruye proyectiles a solo unos centímetros del vehículo. En agosto de 2018, el Ejército decidió no continuar con la calificación del sistema Iron Curtain debido a problemas de madurez del sistema.

MBT urbanizados

Los tanques Merkava Mk.4 y Merkava Mk.5 han desempeñado un papel central en las operaciones militares de Israel en escenarios de combate urbano reciente, como en la Franja de Gaza y otras áreas de conflicto. Su diseño y capacidades se han aprovechado para responder a las complejidades del entorno urbano, donde el combate es cercano, impredecible y repleto de amenazas asimétricas, como explosivos improvisados (IEDs), túneles y francotiradores. A continuación, se detalla el rol específico de estos tanques, su integración con otros activos, y su desempeño en combate:

Rol de los tanques Merkava Mk.4 y Mk.5

  1. Vehículos de soporte pesado en combate urbano:

    • Los tanques Merkava Mk.4 y Mk.5 se utilizan como vehículos de soporte pesado, brindando apoyo de fuego directo a la infantería y sirviendo como una fortaleza móvil. Están diseñados para enfrentar tanto amenazas antitanque como hostiles en posiciones fortificadas dentro de zonas urbanas densamente pobladas.
    • Su blindaje avanzado y la capacidad de soportar impactos de misiles antitanque han sido fundamentales para proteger a la tripulación y proporcionar una base segura desde la cual operar en territorios hostiles.
  2. Capacidad de transporte de tropas y evacuación de heridos:

    • Una característica única de los tanques Merkava, especialmente los modelos Mk.4 y Mk.5, es su capacidad de transportar hasta seis soldados adicionales o de servir como ambulancia para evacuar a heridos desde el campo de batalla. Esto ha sido crucial en el combate urbano, donde el acceso rápido a las zonas de enfrentamiento y la capacidad de proteger a los soldados heridos resulta vital.
    • Esta flexibilidad le permite al Merkava realizar operaciones de evacuación bajo fuego, algo que lo distingue de otros tanques tradicionales que solo se enfocan en el combate.


Combinación con otros activos

  1. Integración con drones:

    • Los Merkava Mk.4 y Mk.5 trabajan estrechamente con drones de reconocimiento, que proporcionan inteligencia en tiempo real sobre las posiciones enemigas, puntos de entrada a edificios, y posibles emboscadas. Esta información permite que los tanques y la infantería a su alrededor actúen de manera precisa y minimicen los daños colaterales.
    • Los drones facilitan la identificación de amenazas como lanzadores de cohetes RPG, francotiradores y posibles trampas explosivas, permitiendo al Merkava utilizar su cañón de 120 mm y sus ametralladoras coaxiales para eliminar estas amenazas de forma efectiva.
  2. Apoyo aéreo cercano:

    • El uso de helicópteros de ataque y aviones de combate ha sido una constante en la doctrina de combate urbana de Israel. Los tanques Merkava a menudo coordinan sus movimientos con helicópteros como el Apache, que proporcionan apoyo de fuego preciso contra objetivos de alto valor o edificaciones fortificadas.
    • Esto permite que los Merkava se centren en proporcionar fuego de apoyo a la infantería y controlar las calles, mientras que el apoyo aéreo elimina amenazas a mayor altitud o más allá del alcance directo del tanque.
  3. Coordinación con fuerzas terrestres:

    • Los tanques Merkava son desplegados junto con unidades de infantería mecanizada, utilizando vehículos blindados de transporte de personal como el Namer (basado en el chasis del Merkava). Esta combinación permite a los tanques operar en áreas urbanas mientras la infantería asegura edificios y flanquea posiciones enemigas.
    • La presencia de infantería cercana ayuda a proteger a los tanques de ataques de corto alcance y facilita la detección de posibles emboscadas en zonas urbanas complejas.

Respuesta a las Fuerzas Defensivas Enemigas

  1. Superar defensas antitanque y emboscadas:

    • Los Merkava han demostrado ser efectivos contra misiles antitanque portátiles como el Kornet gracias a su sistema de protección activa Trophy. Este sistema detecta y destruye misiles antes de que impacten el tanque, aumentando considerablemente la supervivencia de los vehículos en ambientes urbanos donde estas amenazas son comunes.
    • El uso de proyectiles de alto poder explosivo (HEAT) y munición de fragmentación permite a los Merkava atacar con precisión posiciones enemigas ocultas en edificios, proporcionando una ventaja frente a fuerzas que usan tácticas de guerrilla.
  2. Movilidad y adaptación a terrenos difíciles:

    • A pesar de su tamaño y peso, los tanques Merkava han sido adaptados para operar en calles estrechas y terrenos urbanos irregulares, utilizando su suspensión y diseño para mantener la estabilidad en movimiento. Esto les permite atravesar obstáculos urbanos y apoyar a la infantería en áreas de difícil acceso.
    • Esta movilidad es crucial para moverse rápidamente en zonas de combate donde la velocidad y la sorpresa pueden ser determinantes en el éxito de una operación.

Los tanques Merkava Mk.4 y Mk.5 han demostrado ser elementos clave en la estrategia de combate urbano de Israel, ofreciendo un balance de poder de fuego, protección y capacidad de apoyo a la infantería. Su uso junto con drones para inteligencia en tiempo real, el apoyo aéreo cercano y la coordinación con fuerzas terrestres maximiza su efectividad en el combate urbano. La capacidad única de transportar tropas y evacuar heridos les confiere una versatilidad adicional, lo que los convierte en una plataforma de combate adaptada a las necesidades del entorno urbano moderno. Enfrentándose a tácticas asimétricas y defensas enemigas, estos tanques han sido una herramienta fundamental para mantener el control territorial y proteger a las fuerzas israelíes en escenarios de alta tensión.


Análisis de un potencial incorporación en el EA

La posible incorporación de tanques Merkava Mk.4 o Mk.5 al inventario del Ejército Argentino plantea un análisis complejo, en el que deben considerarse tanto los beneficios estratégicos y operacionales que estos vehículos aportarían como las limitaciones y desafíos logísticos que enfrentaría Argentina al integrarlos en su entorno geográfico e infraestructura. A continuación, se presenta un análisis crítico de los pros y contras de esta incorporación, con especial énfasis en el problema del peso y la movilidad sobre puentes y otras estructuras.

Pros de la adquisición del Merkava para el Ejército Argentino

  1. Capacidades avanzadas de protección y combate:

    • Los Merkava Mk.4 y Mk.5 son conocidos por su blindaje avanzado y sistema de protección activa Trophy, que proporciona una defensa eficaz contra misiles antitanque y RPGs. Esto sería una mejora significativa en la capacidad de protección para las tropas argentinas, especialmente en escenarios de combate moderno donde las amenazas antitanque son comunes.
    • Además, su capacidad para transportar tropas o heridos en su interior le confiere una versatilidad superior a la de otros tanques, permitiendo realizar operaciones de evacuación en situaciones críticas y apoyar a la infantería de manera más directa.
  2. Potencial para operaciones en terrenos hostiles:

    • El diseño del Merkava, adaptado a terrenos difíciles y urbanos, podría ser beneficioso para las operaciones en regiones como la Patagonia, que presenta un terreno desafiante, o en posibles despliegues en áreas urbanas. Su movilidad táctica y potencia de fuego lo harían útil en operaciones defensivas y de proyección de poder en el sur del país o en otros lugares estratégicos.
  3. Fortalecimiento de la disuasión regional:

    • La incorporación de un MBT (Main Battle Tank) tan avanzado como el Merkava serviría para aumentar la capacidad disuasiva del Ejército Argentino frente a posibles amenazas regionales, mejorando su posición estratégica en Sudamérica. Esto sería especialmente relevante en un contexto de actualización de material militar en la región.


Contras de la adquisición del Merkava para el Ejército Argentino

  1. Problemas de movilidad por infraestructura insuficiente:

    • Uno de los problemas históricos en Argentina ha sido la capacidad de los puentes y carreteras para soportar el peso de tanques modernos. El Merkava, con un peso superior a las 65 toneladas, podría superar los límites de carga de muchos puentes y caminos en el país, lo que limitaría significativamente su movilidad operativa. Esto haría que su despliegue se restrinja a ciertas regiones donde la infraestructura permita su paso.
    • Las limitaciones en la movilidad afectarían su capacidad de reacción rápida y la flexibilidad estratégica en caso de necesitar un despliegue en distintas partes del país, algo fundamental para el Ejército Argentino, que debe poder operar en áreas diversas y dispersas geográficamente.
  2. Costos adicionales en infraestructura:

    • Para poder operar los Merkava a lo largo del territorio argentino, sería necesario invertir en reforzar puentes y otras estructuras para soportar el peso de estos tanques. Esto implicaría un costo adicional significativo, que podría superar los beneficios de adquirir los vehículos si se considera el presupuesto limitado de defensa en Argentina.
    • Además de los costos financieros, estas obras de infraestructura también requieren tiempo, lo que retrasaría la plena operatividad de los Merkava y podría generar problemas logísticos si las mejoras no se realizan de manera coordinada con la llegada de los tanques.
  3. Complejidad logística de mantenimiento y suministro:

    • Los Merkava, al ser vehículos de origen israelí, implicarían una dependencia logística para la obtención de repuestos y mantenimiento avanzado. Dado que el Ejército Argentino no tiene experiencia previa con esta plataforma, sería necesario invertir en la capacitación de personal y en la creación de una cadena logística que pueda sustentar su operación a largo plazo.
    • La complejidad de la tecnología del Merkava, especialmente en los sistemas de protección activa y blindaje avanzado, requeriría de un apoyo técnico especializado, lo que podría representar un desafío en términos de autosuficiencia operativa.


Análisis final y balance

La incorporación del Merkava Mk.4 o Mk.5 al Ejército Argentino traería consigo capacidades de combate significativamente superiores a las que actualmente posee, especialmente en cuanto a protección y versatilidad en el campo de batalla. Sin embargo, estas ventajas deben sopesarse frente a las limitaciones impuestas por la infraestructura argentina y los costos asociados a la adaptación del entorno logístico y estructural del país.

  • A favor, se obtiene un vehículo que mejora la capacidad de respuesta a amenazas modernas y proporciona una herramienta poderosa para la defensa y disuasión. Además, su diseño permite adaptarse a diversas funciones, desde el combate directo hasta el apoyo humanitario.

  • En contra, las limitaciones en la movilidad debido a la infraestructura y los costos adicionales de su despliegue representarían un desafío importante. Si el país decide no adaptar la infraestructura, el Merkava perdería gran parte de su potencial estratégico al quedar restringido a áreas específicas, lo cual limitaría su uso en el vasto territorio argentino.

La decisión de incorporar el Merkava al inventario del Ejército Argentino, por lo tanto, no solo dependería de las capacidades técnicas del tanque, sino también de una evaluación rigurosa de los costos logísticos y de infraestructura que garantizarían su operatividad en el terreno. Esto requeriría una planificación a largo plazo, donde la modernización de la flota de tanques esté acompañada de una mejora en la infraestructura de transporte militar del país.












sábado, 1 de febrero de 2025

Análisis: Ucrania y la Legión Extranjera para derrotar a Rusia

General Jiří Šedivý: Ucrania necesita una Legión Extranjera funcional apoyada por Occidente

 
Entrevistamos al ex jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas checas, general Jiří Šedivý, quien, como es su costumbre, describe sin exagerar la realidad del conflicto en Ucrania y la situación de las tropas ucranianas y rusas. El general Šedivý analiza, entre otros temas, los errores fundamentales cometidos por la parte ucraniana, la inutilidad de la operación Kursk y la participación de las tropas norcoreanas, que, en su opinión, no constituye una escalada significativa.

CZ Defence


Imagen: La guerra en Ucrania dura casi tres años | Shutterstock

Se acerca el tercer aniversario de la invasión rusa de Ucrania y la situación en los campos de batalla del este no parece muy optimista para los ucranianos. La ayuda occidental a Ucrania es cada vez menor y poco constante. ¿Quiere Occidente siquiera que Ucrania derrote a Rusia?

Por supuesto, Occidente quiere que Ucrania gane la guerra contra Rusia, pero incluso Occidente tiene ciertas limitaciones, como las políticas vinculadas al funcionamiento de la Alianza del Atlántico Norte y la preocupación de que un paso en falso pueda provocar una escalada y arrastrar a la OTAN al conflicto. Esos temores son perfectamente legítimos y lógicos.

También debemos tener en cuenta las limitaciones económicas y materiales. Existe un debate constante sobre la incapacidad de la industria europea para igualar las capacidades de producción rusas, pero debemos recordar que Europa no está en estado de guerra. Las economías europeas no se han adaptado a la producción bélica como se ha visto en Rusia; seguimos operando en un entorno competitivo, en tiempos de paz. La idea de que alguien podría simplemente ordenar la producción de un millón de balas al año y que todo el mundo lo acataría no es realista. Creo que éstas son las principales razones por las que la ayuda occidental a Ucrania sigue siendo limitada.

Los ucranianos llevan mucho tiempo pidiendo permiso para adentrarse más en territorio ruso con armas suministradas por Occidente, pero hasta ahora sin éxito. ¿Occidente concederá finalmente a Ucrania esta posibilidad? (Esta entrevista con el general Šedivý se realizó antes de que el presidente estadounidense Joe Biden decidiera permitir a Ucrania el uso limitado de armas estadounidenses de largo alcance en territorio ruso, nota del editor).

Es importante recordar que Ucrania también posee sus propios medios para penetrar en territorio ruso mucho más allá de los 500 kilómetros que alcanzarían las armas occidentales propuestas. Recientemente, Ucrania presentó un nuevo misil balístico con un alcance teórico de más de 500 kilómetros. Ucrania no está completamente indefensa; por supuesto, necesita muchas más armas de ese tipo, y deberíamos reconocerle finalmente el derecho a la legítima defensa. Si Ucrania recibe esas capacidades, debería tener derecho a utilizarlas. Sin embargo, esto sigue siendo un debate político, y es probable que la decisión política tome tiempo.

También hay que tener en cuenta que Ucrania tiene limitaciones en materia de recursos humanos, ya que su población es considerablemente menor que la de Rusia. Ucrania también ha cometido errores y ha tomado decisiones que han acentuado este déficit.

Estados Unidos no sólo enfrenta desafíos en Europa con Ucrania, sino que también tiene problemas acuciantes en Indochina y Oriente Medio, áreas que requieren una atención más urgente que Ucrania.

En otras palabras, ¿el conflicto en Ucrania es un campo de batalla secundario para Estados Unidos, con su principal foco en China? ¿El debilitamiento de Rusia es simplemente un beneficio?

Sí, pero eso no implica que Estados Unidos quiera impedir que Ucrania gane y simplemente mantener el conflicto a un nivel que debilite a Rusia. Los políticos estadounidenses declaran abiertamente que Ucrania es principalmente un asunto europeo; así ha sido desde el principio y Europa no lo ha resuelto de manera efectiva.

Recientemente, el presidente ucraniano Zelenski expresó su frustración por el hecho de que sólo se haya recibido alrededor del 10% de la ayuda prometida por Estados Unidos desde abril. Esto es un gran problema…

El presidente Zelenski señaló que este retraso no se debe a decisiones políticas, sino a obstáculos prácticos y burocráticos. Sin embargo, el impacto es el mismo. Por otra parte, la ayuda nunca estuvo pensada para ser brindada de una sola vez. Estados Unidos está abordando múltiples crisis, no solo la de Ucrania. El presidente Zelenski puede ser muy impaciente. Entre las dificultades actuales de Ucrania, la movilización retrasada del año pasado y la contraofensiva mal planificada son factores significativos. La movilización limitada de este año y la cuestionable ofensiva de Kursk también contribuyen a los desafíos que enfrenta Ucrania. Sin embargo, el problema fundamental es el número limitado de soldados ucranianos y su moral menguante. Muchos de los primeros voluntarios están agotados o ya no están en servicio.

¿El cambio en el liderazgo militar ucraniano ha afectado a la estrategia de Ucrania contra los agresores rusos?

El otoño pasado, el general Zaluzhnyi, destituido, anunció que la contraofensiva no había logrado sus objetivos y que Ucrania necesitaría cambios fundamentales para adoptar un enfoque diferente. Creo que las presiones políticas influyeron significativamente en la planificación de la contraofensiva del año pasado, afectando a las decisiones militares. El general Zaluzhnyi declaró que necesitaba medio millón de tropas adicionales, pero finalmente fue reemplazado por el general Syrskyi, quien aparentemente aceptó la reducción de las cifras de movilización bajo la presión política encabezada por el presidente Zelensky. Las operaciones en la región de Kursk reflejan esta influencia. Ningún comandante de nivel estratégico habría lanzado una operación de ese tipo perdiendo terreno en otras partes sin tener reservas sustanciales más allá de las desplegadas en Kursk. Claramente, Ucrania agotó sus reservas disponibles allí.

Los ucranianos han dado diferentes razones para la incursión en la región de Kursk. ¿Considera que se trata de un error estratégico fundamental?

En esas circunstancias, fue un error estratégico. Si se hubiera lanzado en otro momento, con fuerzas adicionales disponibles para contrarrestar los ataques rusos, podría haber tenido sentido. Al principio, el propio Zelenski tuvo dificultades para explicar por qué se llevó a cabo esta operación. Más tarde surgieron múltiples justificaciones que indicaban que la operación podría haberse detenido porque carecía de un propósito claro. En mi opinión, fue una apuesta arriesgada.

Por otra parte, los ucranianos todavía controlan una parte sustancial del territorio ruso ocupado…

Ucrania controla aproximadamente la mitad del territorio capturado inicialmente. Sin embargo, la operación no logró su objetivo de alejar a las tropas rusas de otras áreas. Este objetivo se cumplió solo parcialmente y la ofensiva rusa continuó sin cesar. Dado el momento elegido, dudo que Ucrania pueda intercambiar este territorio por áreas que actualmente están bajo control ruso. La operación Kursk parece haber sido mal planificada y ejecutada.

Según se informa, hay soldados norcoreanos estacionados en la región de Kursk. En su opinión, ¿representa una escalada significativa por parte de Rusia involucrar a un ejército extranjero en los combates? ¿No es un poco desesperado por parte de Rusia desplegar soldados norcoreanos?

El hecho de que estos soldados entren en territorio ucraniano podría representar una escalada importante, pero parece que sólo están desplegados en territorio ruso. ¿Está Putin desesperado? Así lo describió recientemente Mark Rutte, el nuevo secretario general de la OTAN. En cualquier caso, si bien Putin es un criminal de guerra que debe rendir cuentas, ciertamente no está desesperado. Ha logrado superar todas las crisis que Rusia ha enfrentado en Ucrania, comenzando por los reveses iniciales inmediatamente después de lanzar la agresión. En ese momento, estaba claro que las fuerzas rusas ignoraban por completo la situación en Ucrania, no solo desconocían la preparación de las tropas ucranianas, sino que también carecían de comprensión del liderazgo político y la determinación del pueblo ucraniano. Los rusos estaban perdiendo incluso durante la primera contraofensiva de Ucrania en 2022. Sin embargo, lograron recuperarse y devastaron efectivamente la última gran contraofensiva de Ucrania en 2023. Se impuso una serie de sanciones a Rusia y muchos asumieron que el país colapsaría. Aun así, Putin logró resistirlas y el impacto de las sanciones ha disminuido significativamente. Más recientemente, hemos visto los éxitos de Rusia dentro de los BRICS. El aislamiento de Rusia, como lo imaginaba Occidente, simplemente no se ha materializado. Es evidente que también a Putin le debe haber sorprendido que las fuerzas ucranianas entraran en la región de Kursk. Sin embargo, al final, reformuló la situación, afirmando que Rusia había sido atacada y debía defenderse, y la sociedad rusa permaneció tranquila. Detuvieron el avance ucraniano y bloquearon una parte importante de las tropas de élite de Ucrania en esa región. Y ahora han desplegado tropas de Corea del Norte (RPDC). Nos sorprende este hecho. Sin embargo, Rusia no ha violado ningún acuerdo internacional al utilizar tropas norcoreanas en su propio territorio en virtud de un tratado interestatal.

Sin embargo, el hecho de que Rusia esté desplegando soldados extranjeros en su propio territorio, cuya calidad y preparación son cuestionables, también sugiere que Rusia puede estar experimentando un déficit significativo en el número de soldados listos para el combate, independientemente de lo que podamos pensar sobre las cifras de bajas rusas reportadas por Ucrania.

Soy escéptico con las cifras de bajas proporcionadas por Ucrania. Lamentablemente, Putin todavía puede reponer el número de tropas con voluntarios suficientemente pagados, y Rusia aún no ha llevado a cabo una segunda movilización, probablemente debido a su sensibilidad política. Hace tiempo que sostengo que subestimar a Putin es un error. No sé cuánto tiempo durarán los soldados norcoreanos en combate, pero yo desde luego no los subestimaría. Aunque estos soldados pueden carecer de experiencia en combate, sin duda están bien entrenados.

Si los ucranianos, al menos por ahora, se niegan a seguir movilizando, la pregunta sigue siendo: ¿por qué no reclutan más tropas en el extranjero?

Cuando comenzó la agresión rusa, se formó la llamada Legión Extranjera. Según Zelenski, en Ucrania había unos 20.000 de ellos. Pero ¿cuántos combatientes extranjeros hay todavía hoy en Ucrania? ¿No era ya una exageración esa cifra? Los informes actuales indican que hay, como máximo, unos 1.500, y no están organizados como una unidad única y compacta, sino que están dispersos en varias formaciones.

Si en Occidente no estamos dispuestos a enviar tropas regulares a Ucrania, entonces deberíamos crear condiciones que permitan a los voluntarios que quieran luchar hacerlo con las mínimas restricciones. Al principio se hicieron esfuerzos, pero no se estableció claramente: no son soldados de la OTAN, son voluntarios de la Legión Extranjera. Francia tiene experiencia con su propia Legión Extranjera y podría haber propuesto: "Creemos una Legión Extranjera para Ucrania". Actualmente, informes prometedores de Polonia indican que alrededor de 700 ucranianos se han inscrito en un programa de entrenamiento y han comenzado su formación allí. Sin embargo, se trata de un número pequeño de soldados y el período de entrenamiento de 35 días es muy corto.


Foto: Jiří Šedivý, ex jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas checas | Instituto CEVRO

Europa cuenta con mecanismos para apoyar este tipo de iniciativas, y esto no es algo sin precedentes. Lamentablemente, aparte de Polonia, ningún otro país europeo ha adoptado un enfoque estructurado. Si bien los voluntarios tienen libertad para alistarse individualmente, este enfoque es inadecuado. En algunos grandes países europeos, en particular Alemania, persiste la creencia de que la guerra terminará y Rusia volverá a ser un socio económico importante.


domingo, 6 de octubre de 2024

MBT: Ariete, ¿el peor de Europa?

El C1 Ariete italiano: ¿es el peor tanque de la OTAN?

El C1 Ariete es el tanque de batalla principal de diseño y construcción nacional de Italia que ha estado en servicio con el ejército italiano desde mediados de la década de 1990.

Es un tanque de batalla principal (MBT) de tercera generación que se hizo a la medida de las necesidades del ejército italiano. Armado con un cañón de 120 mm y un sistema de control de fuego de vanguardia, el Ariete era uno de los mejores tanques del mundo en el momento de su presentación.

Sin embargo, hoy su reputación ha disminuido significativamente.

 Se espera que el Ariete permanezca en servicio con Italia hasta mediados de la década de 2030. Imagen del ejército italiano CC BY 2.5.

Como carro de combate principal (MBT) de uno de los principales miembros de la OTAN, el Ariete está clasificado contra el Challenger 2, Abrams, Leopard 2 y Leclerc. Comparado con estos tanques, el MBT de Italia no ha visto el mismo nivel de atención y mejoras, lo que lleva a muchos a considerarlo como un tanque que no es apto para el combate actual.

Pero, ¿está justificada esta reputación?


En necesidad de un tanque nuevo

En la década de 1980, la flota MBT de Italia estaba formada principalmente por M60A1 estadounidenses y Leopard 1 alemanes. En este punto, los tanques como el M1 Abrams y el Leopard 2 estaban en servicio activo, lo que hacía que los tanques como el Leopard y el M60 quedaran obsoletos.

Naturalmente, Italia quería actualizarse.

Iveco Fiat y Oto Melara trabajaron juntos como un consorcio, con el último desarrollando la torreta y el sistema de armas y el primero centrándose en el casco.

 A mediados o finales de la década de 1980, los Leopard 1 y M60 de Italia estaban simplemente desactualizados en comparación con los últimos MBT.

El tanque se llamaría Ariete, que significa Ram, en honor a la famosa división blindada italiana que luchó en África junto a los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial.

En 1986 se completó un prototipo de este nuevo vehículo y en 1989 se fabricaron otros seis modelos de preproducción.

Estos ejemplos se probaron exhaustivamente, recorriendo una distancia combinada de 10 000 millas (16 000 km) durante las pruebas.

El Ariete estaba destinado a entrar en servicio en 1993, pero los retrasos lo retrasaron hasta 1995. La producción continuó hasta 2002, con 200 construidos en total.

 Se planearon más Arietes, pero solo se construyeron 200. Imagen del Comando de Entrenamiento del Séptimo Ejército CC BY 2.0

El Ariete

El Ariete trajo muchas de las características típicas que se ven en los MBT de tercera generación, como un arma completamente estabilizada, protección NBC (nuclear, biológica, química) y armadura compuesta.

Externamente, se parece a una combinación del Leopard 2 y el Challenger 2. Al igual que esos vehículos, tiene un solo conductor en la parte delantera, una torreta montada en el centro con tres tripulantes y su fuente de alimentación en la parte trasera que impulsa las ruedas dentadas traseras.

Está protegido por una armadura compuesta clasificada, que, según se informa, es similar a la utilizada en el Challenger 2 y Abrams. Sin embargo, la armadura del Ariete era más delgada de lo deseado para ahorrar peso.

 Hoy en día, lo más probable es que la armadura de Ariete falte en comparación con sus contemporáneos. Imagen del ejército italiano CC BY 2.5.

La suspensión del Ariete es del tipo de barra de torsión, pero toma prestadas muchas características del Leopard 2 alemán que había entrado en servicio una década antes.

En la parte trasera del tanque hay un motor multicombustible turboalimentado V12 de 25,8 litros IVECO MTCA que tiene una potencia de 1.270 hp y 4.615 nm de torque. La potencia se envía a través de una transmisión automática alemana ZF de cuatro velocidades.

Dentro de la torreta hay un cañón de ánima lisa L/44 de 120 mm desarrollado por OTO Breda. Esta pistola es similar a la pistola Rh-120 L/44 utilizada en los primeros Leopard 2 y M1A1 Abrams.

 Cuando se introdujo, el Ariete estaba armado con uno de los cañones de tanque más potentes disponibles. Imagen del Comando de Entrenamiento del Séptimo Ejército CC BY 2.0

Debido a sus similitudes, puede disparar la mayoría de las rondas estándar de la OTAN de 120 mm. El cañón se completa con una funda térmica, un extractor de humos y un sensor de referencia de boca. Para el trabajo antipersonal, el Ariete tiene una ametralladora MG42/59 de 7,62 mm montada coaxialmente junto al cañón principal.

Los movimientos de la torreta y del cañón están controlados por un sistema electrohidráulico.

El sistema de control de incendios es de tipo digital fabricado por Galileo Avionica. Tiene en cuenta los datos atmosféricos y la situación física del tanque para aumentar la precisión del arma.

El artillero tiene una mira térmica que también puede usar el comandante, pero el comandante carece de su propia mira térmica dedicada.

El comandante del Ariete carece de su propia mira térmica. Esto hace que sea difícil ver de noche y en condiciones de campo de batalla como el polvo y el humo.

Todo en el Ariete es un MBT bastante liviano con solo 60 toneladas. Esto es significativamente menos que el Leopard 2, el Challenger 2 y el Abrams, todos los cuales superan las 70 toneladas según la variante y los complementos instalados.

Su motor es capaz de impulsarlo hasta una velocidad de más de 40 mph (65 km/h).

¿Qué tan malo es?

Al igual que con llegar a una conclusión sobre el rendimiento de cualquier tanque, es difícil hacer una evaluación sin comparaciones directas en condiciones de batalla iguales. Sin esto, es difícil saber si un vehículo está mal diseñado, si lo maneja una tripulación mal capacitada o si se usa de una forma en la que nunca fue diseñado.

Aún así, el Ariete tiene algunas debilidades que ciertamente podrían convertirse en un problema en el campo.

La mayoría de estos están relacionados con su capacidad de supervivencia y sistemas limitados de control de incendios. Se desconocen las especificaciones exactas del blindaje, pero teniendo en cuenta que el Ariete pesa casi 20 toneladas menos que un M1A2 Abrams pero tiene un tamaño similar, es evidente que no puede tener los mismos niveles de protección que un vehículo como el Abrams.

 El M1A2 Abrams pesa unas 20 toneladas más que el Ariete, a pesar de tener prácticamente el mismo tamaño. La mayor parte de este peso extra es armadura. Imagen del Comando de Entrenamiento del Séptimo Ejército CC BY 2.0

Además, la munición del Ariete se almacena en todo el tanque, lo que presenta un grave riesgo de detonación si el tanque es penetrado por una ronda entrante. Si bien el Ariete no es el único tanque que carece de compartimentos de municiones separados y paneles que se desprenden, su armadura de casco liviano hace que esto sea una preocupación mayor en comparación con otros MBT.

Otra característica mediocre del Ariete son sus sistemas ópticos y de control de incendios. Sus sistemas de control de incendios fueron excelentes para el día, pero no están a la altura de los últimos sistemas.

El comandante carece de una mira térmica dedicada que puede dificultar gravemente la conciencia situacional de la tripulación.


En el campo de batalla moderno, las miras térmicas son fundamentales para ver a tu enemigo.
Imagen de Kaminski CC BY-SA 3.0.

Incluso la mira térmica del artillero solo es efectiva hasta aproximadamente 1500 m, significativamente menos que la resolución del objetivo de imágenes térmicas de Abrams de 4000 m

Su control de torreta electrohidráulico también está desactualizado.

La mayoría de los problemas del Ariete no son inherentes al tanque en sí, sino que se deben a la falta de mejoras.

Con los MBT modernos sirviendo durante décadas, las actualizaciones son fundamentales para que sigan siendo competitivos. Podría decirse que este es el mayor defecto del Ariete, y ni siquiera es culpa del tanque.

C2 Ariete

De hecho, Italia intentó actualizar el Ariete a principios de la década de 2000.

Este vehículo tendría un mayor blindaje, torreta totalmente eléctrica, sistemas de control de fuego mejorados, óptica térmica de tercera generación para el comandante y el artillero y, potencialmente, incluso un cargador automático.

El motor MTCA V12 del Ariete habría aumentado su cilindrada a 30 litros, equipado con inyección directa de combustible y recibido un turbocompresor adicional. Estas modificaciones habrían aumentado la potencia a 1600 hp y 5500 nm de torque, convirtiéndolo en uno de los motores MBT más potentes en uso.

Esta versión se habría llamado C2 Ariete o Ariete Mk. 2.


Las mejoras propuestas al Ariete lo habrían transformado en una verdadera fuerza a tener en cuenta.
Imagen del ejército italiano CC BY 2.5

Desafortunadamente, estas actualizaciones nunca ocurrieron, lo que resultó en que el tanque fuera dejado tecnológicamente atrás por sus pares.

A pesar de que las primeras conversaciones sobre actualizaciones ocurrieron hace dos décadas, Italia actualmente planea implementarlas para extender la vida útil de sus Arietes actuales.

Debe recordarse que las estadísticas de un tanque en papel no son un indicador preciso del rendimiento, como se vio muchas veces a lo largo del siglo XX. El entrenamiento, la doctrina, las tácticas y la logística suelen influir mucho más en el éxito de un tanque.

Si se usa correctamente, el Ariete y su cañón principal de 120 mm son más que capaces de enfrentarse a otros MBT.

martes, 3 de septiembre de 2024

Análisis: Cómo se determina la longitud del cañón de un arma 5.56mm



Estudios de longitud del cañón en armas de la OTAN de 5,56 mm



A medida que se registraba cada conjunto de mediciones, el cañón se acortaba (y se volvía a coronar) una pulgada a la vez y el sensor de presión se movía a la ubicación más lejana resultante.
En esta foto, el cañón se ha acortado a veinte centímetros.

Ha habido un cambio cultural desde el cañón de 20 pulgadas de longitud en los sistemas de armas AR-15/M16 con recámara para el cartucho OTAN de 5,56 × 45 a cañones progresivamente más cortos con el fin de producir un arma de asalto/entrada cada vez más compacta sin recurrir a un diseño bull-pup. El simple uso de estas armas de cañón corto ha demostrado la necesidad de suprimir tanto el sonido como el destello, cuya intensidad (en longitudes de cañón excepcionalmente cortas) se acercaba a la intensidad de un dispositivo de desvío de destello. Este cambio hacia cañones más cortos ha resultado en que el Ejército y el Cuerpo de Marines de EE. UU. adopten la carabina M4 con cañón de 14,5 pulgadas con un rediseño del 5,56 × 45 de la munición SS-109 de 55 granos a la munición M855 de 63 granos para optimizar la longitud de este cañón. . El diferente diseño de la bala también requirió un cambio en la velocidad de torsión del estriado del original de 1:12 pulgadas a 1:7 pulgadas.

Las fuerzas del orden y algunas unidades de operaciones especiales han continuado esta tendencia utilizando armas equipadas con cañones de 10,5 pulgadas, y existe cierto interés erróneo (en opinión de estos autores) en las armas tipo M16 que utilizan cañones de 7 pulgadas. Además de los horrendos niveles de destello y sonido, estas armas de cañón ultracorto introducen importantes problemas auxiliares, incluido el funcionamiento y la confiabilidad del arma, así como la estabilidad del proyectil y la letalidad del cartucho.

Uno de los autores mide habitualmente las presiones de la cámara de entrada en los silenciadores de su empresa para calcular factores de seguridad para diferentes longitudes de cañón estándar. Un soporte especial que sujeta el sensor piezoeléctrico Kistler 6215 se sujeta sobre el supresor donde se ha perforado un orificio de 2,5 mm a través de la pared del supresor. Se muestra un supresor de 5,56 mm en un M16 con cañón de 10,5 pulgadas en un soporte Lead-Sled.

En los últimos años, los diseñadores se han dado cuenta de las limitaciones de la integridad estructural de los supresores debido a las rápidas variaciones de presión en la cámara de entrada de sus supresores. La cámara de entrada se visualiza fácilmente como un cilindro simple que actúa como un recipiente a presión con un orificio en el otro extremo para controlar la tasa de disminución de presión. Con los disparos, la presión alcanza su punto máximo casi instantáneamente y cae literalmente en microsegundos. En este corto intervalo de tiempo se aplican muchas tensiones estructurales. El cañón de un arma de fuego también se puede visualizar como un recipiente a presión, pero de longitud variable a medida que la bala avanza a lo largo de su longitud.

La intuición ha pasado a la sólida práctica de ingeniería de medir realmente las presiones en las cámaras de entrada del supresor para calcular la tensión circular y, conociendo el límite elástico del material, el factor de seguridad. Si bien algunos de estos factores pueden aproximarse mediante cálculos, las mediciones reales son definitivas. Estas cuestiones son el tema de este artículo.

El sonido se genera por la liberación repentina de gases a alta presión en la boca del cañón en el momento de la salida de la bala, y para controlar (o reducir) adecuadamente el nivel de sonido, se debe diseñar un supresor para manejar esta presión. Lo que no ha sido inmediatamente evidente es la relación entre las presiones de la recámara de entrada del supresor y la presión residual en el ánima del arma de fuego en el instante de la salida de la bala y (por extensión) los problemas en el diseño del supresor. Con el análisis de elementos finitos para el diseño de supresores cada vez más frecuente, las presiones reales medidas proporcionarán información mucho más precisa y creíble que las presiones estimadas (o calculadas) a partir de las tablas de presión máxima de la cámara del SAAMI (Instituto de Fabricantes de Armas y Municiones Deportivas). Las presiones SAAMI se miden con dimensiones de recámara y municiones específicas, y no todas las recámaras coinciden exactamente con las recámaras SAAMI, especialmente las recámaras militares.

El sensor piezoeléctrico se muestra en su lugar en el cilindro de 24 pulgadas con una abrazadera en U de seguridad. El arma está montada en el soporte de la máquina, lista para realizar disparos de prueba.

La otra cuestión que se plantea es la de la energía cinética de la bala, que varía con el peso (masa) del proyectil y el cuadrado de la velocidad. Intuitivamente, se sabe que la velocidad variará con la longitud del cañón, pero la variación real no se puede determinar fácilmente a partir de una única medición de la longitud del cañón.

Los autores tienen serias preocupaciones sobre estas cuestiones de confiabilidad, función, letalidad y velocidad a medida que disminuye la longitud del cañón. Al examinar la velocidad de la bala, los niveles de sonido y la presión del calibre en función de la longitud del cañón, los autores esperaban correlacionar y determinar la longitud óptima del cañón en respuesta a las solicitudes actuales de sistemas de armas tipo M16 de cañón corto.

Junto al deseo de acortar los cañones está el requisito de reducir el peso de los accesorios, incluidos los silenciadores. Mientras que algunos supresores se rediseñan para utilizar aleaciones fuertes y livianas, otros simplemente reducen el peso adelgazando los elementos estructurales, incluido el espesor de la pared exterior.

La tensión circular es el nombre que se le da al cálculo de las fuerzas que intentan romper una cámara o un recipiente a presión. Un silenciador, especialmente la cámara de entrada, es un recipiente a presión que contiene los gases a presión durante un período de tiempo extremadamente corto. Las unidades de tensión circunferencial son unidades de presión (psi) y son proporcionales al diámetro y a la presión interna máxima máxima e inversamente proporcionales al espesor de la pared.

El sensor piezoeléctrico se enroscó en su adaptador, y el adaptador se enroscó en el último puerto del cañón para obtener una medición máxima de la presión del orificio justo cuando la bala salía del cañón (descorchando).

El factor de seguridad es la relación entre el límite elástico del material utilizado para el silenciador dividido por la tensión circunferencial. Con un factor de seguridad de 1, el 50% de las unidades fallarán. El requisito militar es un factor de seguridad de 2 o más, y la industria aeronáutica exige un factor de seguridad mínimo de 2,5. El factor de seguridad se reduce cuando se adelgaza la pared de un supresor, especialmente cuando se combina con un aumento del diámetro. El uso de materiales de bajo límite elástico, como los aceros inoxidables resistentes a la corrosión de la serie 300 predominantes, puede resultar en un producto inseguro, especialmente si se considera la degradación del límite elástico con las temperaturas elevadas de tan solo 100 disparos rápidos.

Además, dado que la presión máxima instantánea en la recámara de entrada de un supresor es proporcional a la presión en el ánima del rifle en el instante en que la bala sale (descorchada) de la boca, también se deduce que cuando se usa en armas de cañón corto con recámara Para el cartucho NATO de 5,56 × 45, las presiones en el supresor pueden exceder su integridad, lo que provoca fallas y posibles lesiones.

La alteración de la longitud del cañón afecta seriamente no sólo la confiabilidad del arma, sino también la velocidad del proyectil (incluida la energía cinética), los niveles de sonido no suprimidos y la intensidad del destello. Las armas de cañón corto accionadas por gas, de las cuales la plataforma AR-15/M4 es de interés, plantean errores de confiabilidad cada vez mayores a medida que disminuye la longitud del cañón. La razón principal es que a medida que se acorta el cañón, disminuye el tiempo de permanencia del proyectil en el orificio después de pasar el puerto de gas. Esto dificulta la sincronización y agregar accesorios de boca (como un supresor de sonido) causará serios problemas de confiabilidad, como ciclos más rápidos. La estabilidad giroscópica del proyectil depende de la velocidad de rotación, que está determinada por la torsión y la velocidad lineal. La inestabilidad provocará una desviación (y un bloqueo) inmediatamente después de descorchar, lo que puede dañar las piezas del supresor y provocar una trayectoria de bala impredecible.

La presión media de cinco disparos en el orificio en el momento del descorche de la bala se representa en función de la longitud del cañón. Es evidente que la presión aumenta exponencialmente al disminuir la longitud del cañón. Este rápido aumento de presión produce niveles de sonido significativamente más altos, así como destellos y tensión en el diseño del supresor. Los valores de 10,5 y 14,5 pulgadas se calcularon promediando las medidas adyacentes.
La velocidad máxima del proyectil M855 se produjo en un cañón de 20 pulgadas. Esto es de esperarse ya que el cartucho fue diseñado específicamente para esta longitud de cañón. La velocidad cae rápidamente a medida que disminuye la longitud del cañón, especialmente por debajo de 10 pulgadas, donde la velocidad cae por debajo de 2500 fps. Las balas M855 que viajan por debajo de 2500 fps al impactar en un objetivo no producirán un canal de herida letal.

Ha habido una serie de estudios que demuestran el gradiente de temperatura externa del cañón en función de la longitud del cañón, además de numerosos estudios de la velocidad de salida en función de la longitud. Los autores no están familiarizados con los estudios que relacionan la longitud con las presiones de orificio medidas (en lugar de calculadas), especialmente las presiones de los puertos en el instante de la salida de la bala (descorchado).

Configuración del experimento
El experimento consistió en medir la presión del orificio en el momento en que la bala se descorcha del estriado para varias longitudes de cañón. Es de conocimiento común que las presiones reales de los puertos piezoeléctricos de lectura directa son mucho más precisas que las mediciones con galgas extensométricas, especialmente porque las mediciones de presión se desean solo en el extremo del cilindro. Una vez calibrado un sensor piezoeléctrico, se puede utilizar en muchos lugares. Por el contrario, se debe recalibrar una galga extensométrica para cada lugar de medición.

Se obtuvo y preparó para la prueba un cañón AR-15 de 24 pulgadas (giro 1:7). El cañón utilizado carecía de puerto de gas para accionar el mecanismo, lo que daba como resultado un arma de un solo disparo. Esto se hizo para evitar inconsistencias causadas por el uso de parte de la presión del gas para operar la acción. El cañón estaba marcado por un corte parcial a intervalos de 1 pulgada que comenzaba en el extremo más alejado y terminaba a 5 pulgadas de la cara del cerrojo. Para mantener la coherencia, la munición utilizada fue toda la bala militar M855, Lake City 2009 y todas del mismo lote. Además, para garantizar la coherencia, la munición se almacenó en una hielera hasta que se cargó y disparó.

 

Por curiosidad (en un cañón separado), se realizaron mediciones de la presión del orificio en un puerto perforado a tres pulgadas de la cara del perno. La presión de perforación en este punto excedía los 55.000 psi.

Se perforó un puerto de 2,5 mm a 1/2 pulgada de la boca y se enroscó para aceptar un sensor de presión piezoeléctrico de medición directa Kistler 6215 en un adaptador corto. Se midieron cinco cuerdas de disparo utilizando un amplificador de carga Kistler 5015 y se promediaron los resultados. Dado que el medidor registra la presión máxima más alta a la que está expuesto, el único pico que verá es cuando la bala está a menos de 1/2 pulgada de la boca, y esto representará la presión del orificio en el momento de descorchar la bala. En cada uno de los cinco disparos en la cuerda, se realizaron mediciones de velocidad a cinco pies de la boca del cañón y se registraron los niveles absolutos de presión sonora utilizando un medidor de nivel de presión sonora Larson-Davis 800B en la ubicación de referencia y el protocolo especificado en Mil-Std 1474D (1 metro a la izquierda de la boca del cañón, 90 grados con respecto al eje del orificio). El arma se mantuvo en un soporte para máquina para mantener la coherencia.

Luego, el cañón se acortó una pulgada a la vez perforando un nuevo puerto de presión a 1/2 pulgada de la nueva boca y el sensor piezoeléctrico se movió a la nueva ubicación. Se repitieron las mediciones anteriores y así sucesivamente. La última serie de mediciones se realizó cuando el cañón tenía 5 pulgadas de largo.

Para satisfacer la curiosidad, en otro cañón, se colocó un puerto a 3 pulgadas de la cara del perno y se midieron y promediaron las presiones del puerto en una muestra de 15 balas.

Datos y análisis
Las mediciones para longitudes de barril de 24 a 5 pulgadas mostraron que la presión en el barril en el momento del descorche variaba de 4,800 psi para el barril de 24 pulgadas a más de 25,000 psi para el barril de 5 pulgadas. Esto se representa en el Gráfico 1 y se resume en la Tabla 1. Trazar el logaritmo de la presión de descorche frente a la longitud del cañón produce un gráfico relativamente recto, que indica que la presión aumenta exponencialmente con el acortamiento del cañón.

Todos los datos (velocidad, presión máxima de perforación en el puerto y nivel de presión sonora) se registraron para cada disparo y se calculó el promedio de los cinco disparos para cada parámetro de medición. Se muestra al Dr. Philip Dater, uno de los coautores, como escriba.

La presión que medimos en el puerto a tres pulgadas de la cara del perno fue de 55,744 psi usando M855 (promedio de 9 disparos). Hubo algunas variaciones entre rondas, con variaciones desde un mínimo de 52.500 psi hasta un máximo de 57.600 psi. Curiosamente, la variación de la presión entre rondas fue menos pronunciada en los puertos más distales. No tenemos las medidas de presión SAAMI para la presión de la recámara en la munición M855 de 5,56 x 45 mm, pero para el Remington .223 comercial, la presión SAAMI máxima promedio aparece en 55,000 psi.

Dado que estas armas se utilizan cada vez más frecuentemente con supresores de sonido, es interesante observar la presión de descorche en los cañones de longitud más común de 14,5 pulgadas y 10,5 pulgadas. Los datos de presión para los barriles de 14,5 y 10,5 pulgadas se aproximaron promediando la presión entre las dos medidas adyacentes (14 y 15 pulgadas, etc.), lo que arrojó presiones de 8.150 y 11.500 psi respectivamente. Hay un interés pasajero en el usuario no serio por suprimir el M16 con un cañón de 7 pulgadas, y la presión de descorche en ese punto es de 17.140 psi, aproximadamente un 50% más alta que para el cañón de 10,5 pulgadas, que en sí mismo es aproximadamente un 50% más alto que el cañón de 14,5 pulgadas.

Uno de los autores midió las presiones de los puertos en la cámara de entrada de uno de los supresores de 5,56 mm de su compañía con un HK416 con cañón de 14,5 y 10,5 pulgadas, y hubo un aumento del 50% en la presión de la cámara del supresor del arma con cañón de 10,5 pulgadas en comparación. a la versión más larga de 14,5 pulgadas. Esto se correlaciona bien con la diferencia en la presión del orificio en el momento del descorche de la bala.

La preparación del cañón consistió en marcar el cañón a intervalos de 1 pulgada con una herramienta de separación y perforar/roscar el puerto para el sensor. Todos menos el último puerto (donde se instaló el sensor de presión) se bloquearon con un tornillo de fijación hermético que se modificó para bloquear completamente el puerto.

La munición M855 está optimizada para un cañón de 20 pulgadas con un cañón giratorio de 1:7. No fue sorprendente que la mayor velocidad de 2979 pies/seg se obtuviera en el cañón de 20 pulgadas, y la menor velocidad en cañones de más de 20 pulgadas se explica por la disminución de la presión que impulsa la bala, que ya no excede la desaceleración por fricción. Después de todo, Eugene Stoner diseñó el cartucho para el cañón de 20 pulgadas.

El nivel de presión sonora se midió según Mil-Std 1474D, que especifica la ponderación A. La ponderación degrada el rendimiento del medidor para que coincida con la respuesta de frecuencia del oído humano, y la ponderación A es precisa y apropiada sólo para niveles de sonido inferiores a 55 dB. Para niveles de sonido superiores a 130 dB, y en particular en la región de 160+ dB del rifle de 5,56 mm sin supresión, las mediciones deben realizarse sin ninguna ponderación (también llamada “lineal” o ponderación Z, según la designación del fabricante del medidor). ). Si bien existe una correlación aproximada mediante la ponderación A entre la presión de descorche y el nivel de sonido medido, las mediciones de sonido no se consideran demasiado precisas debido al cumplimiento de Mil-Std.

Los niveles de sonido son medidas de presión expresadas como una relación logarítmica de la presión real referida a 20 micropascales, el umbral de la audición humana. Hubo un poco menos de consistencia en las mediciones de sonido que en las mediciones reales de presión del barril descorchado, en parte debido a la adición de varias variables más. Estos incluían la impedancia acústica del aire y la dirección/velocidad del viento. Además, las imprecisiones en este rango de intensidad de sonido al utilizar la ponderación A requerida introducen cierto nivel de imprecisión que probablemente no se vería en mediciones no ponderadas. Cuando la presión se representa en función del nivel de presión sonora en decibeles y el nivel de presión sonora en función de la longitud del cañón, hay una desviación ligeramente mayor del promedio proyectado, pero la tendencia y la correlación general son estadísticamente significativas. Los niveles reales de presión sonora variaron desde 162,5 dB(A) en el cañón de 24 pulgadas hasta 165,1 dB(A) en el cañón de 5 pulgadas.

Igualmente esclarecedora en este estudio fue la correlación entre la velocidad y la longitud del cañón (ver Gráfico 2). Para generar un canal de herida letal, el proyectil M855 debe tener una velocidad de al menos 2500 pies/seg al impactar con el objetivo. Por debajo de esa velocidad crítica, la bala M855 simplemente perfora un agujero de 1/4 de pulgada en el objetivo, que con demasiada frecuencia no es letal a menos que atraviese una estructura vital. Parte de esta limitación se está abordando con proyectiles más nuevos que no estaban disponibles para los autores en el momento del estudio. En los barriles más largos, la velocidad máxima de 2979 pies/seg fue en el barril de 20 pulgadas con una velocidad de aproximadamente 2700 pies/seg en el barril de 14,5 pulgadas. La velocidad crítica de 2.500 pies/seg estaba en un cañón de entre 9 y 10 pulgadas de largo, lo que muestra aún más la locura de considerar un cañón de 7 pulgadas para este cartucho.

El arma con el sensor de presión colocado se muestra en el soporte de la máquina. Delante de la boca están las pantallas para medir la velocidad y a la izquierda del arma está el micrófono para medir la presión sonora. El micrófono está ubicado a un metro a la izquierda de la boca del cañón en la ubicación de referencia mencionada en Mil-Std 1474.

Conclusión
Para satisfacer la curiosidad de los autores sobre los efectos de la longitud del cañón en las armas de la OTAN de 5,56 × 45, se diseñó un experimento para medir la presión real del orificio del cañón en el momento de la salida del proyectil, la velocidad y el nivel de presión sonora con un cañón. longitud que varía entre 24 y 5 pulgadas. Esto tiene practicidad en múltiples niveles.

Al considerar la supresión del sonido de este cartucho, se debe diseñar un supresor para manejar la presión de los gases presentados en el instante de la salida de la bala, y presiones de descorche más altas requieren un supresor más grande para manejar la carga de gas presentada. En estudios separados, los autores han observado que el gradiente de presión no es uniforme en toda la cámara de entrada de un supresor debido al movimiento hacia adelante de los gases. Esto indica que una cámara de entrada de mayor volumen necesita depender de una mayor longitud en lugar de un diámetro. Con presiones de descorche más altas, también hay una mayor erosión del deflector de explosión del supresor debido a las partículas de polvo sobrecalentadas y parcialmente quemadas que funcionan como una antorcha de plasma. Además, aumentar el diámetro requiere paredes más pesadas para evitar que aumente la tensión circular (y disminuya el factor de seguridad) con el resultado adicional de un supresor físicamente más pesado. Para intentar preservar el rendimiento de reducción de sonido, un supresor deberá ser más largo (y más pesado) con un cañón más corto, anulando la mayor parte de la compacidad obtenida al acortar el cañón.

En segundo lugar, con cañones más cortos, el ajuste del puerto de gas para el ciclo del arma se vuelve mucho más crítico. Agregar un supresor, que aumenta ligeramente la presión del calibre, dará como resultado un ciclo más errático y contundente del arma, lo que conducirá a una falla más temprana del arma. Es necesario recordar que el cartucho NATO de 5,56×45 fue diseñado específicamente para un cañón de 20 pulgadas en un arma operada por gas con un tiempo de permanencia de 7 pulgadas después del puerto de gas. El cañón M4 de 14,5 pulgadas conserva la longitud de permanencia de 7 pulgadas después del puerto de gas.

Por último, la disminución de la velocidad con cañones mucho más cortos que 14,5 pulgadas tiene una serie de efectos no deseados. Una velocidad lineal reducida produce una velocidad de rotación más baja, lo que dará como resultado una estabilidad giroscópica disminuida de la bala. También dará como resultado una energía cinética del proyectil significativamente menor, una menor capacidad para generar un canal significativo y alcanzará un punto de rendimiento decreciente en el que la letalidad del proyectil definitivamente entra en duda.

Así, en opinión de los autores, las longitudes de cañón inferiores a 14,5” en este calibre introducen problemas de eficacia que pueden resultar perjudiciales para el usuario.